Largos pasillos repletos de todo tipo de alimentos (como es lógico) venidos del continente asiático, entre ellos: licores, cervezas, refrescos, algas, bambú, jengibre, sésamo, pan de gambas, arroz, noodles, fideos de maíz, fideos de patata, fideos de arroz, fideos de frijoles, seitán, salsa de ostras, salsa de soja, salsa de pescado, crema de cacahuetes y congelados como empanadillas, pastas o albóndigas. Incluso diccionarios español-chino y algún juego de té, ya en una vidriera llegando a caja.
Además de la inmensa cantidad de productos que ofrecen, los precios son realmente económicos. Ved, por ejemplo:
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Fideos de frijoles 1.20€
Cerveza china 0.80€ Bebida de soja de Malasia 0.65€ Mochi artesanal de Taiwán 1.45€
Paquete 20 palillos 0.95€
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Salsa de ostras de Tailandia 1.95€
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Pasarse por este súper es una gran idea tanto para los amantes de la gastronomía oriental como para los que se acerquen curiosos a sus exóticas y saludables recetas. Sea como sea, alucinarás. Yo soy nueva en este mundo y me quedo en trance dando vueltas entre sus pasillos.
